lunes, febrero 18, 2008

alto consumo

haz de bombilla

Justo Olegario Andrade estaba ocupado en menesteres peversos,
siguiendo un haz artificial de perfecto residuo, de precisos latifundios carnales,
de olvidados relatos orientales y de un previsible e inútil futuro...

bombilla

se decidirá en un tiempo de eclécticos vaivenes
cuando sea demasiado tarde
se complacerá en presentaros
se arrepentirá de algunas compras
se olvidará de algunas fechas...

martes, febrero 12, 2008


- Le dijo huevo Garat al colorado Orlandini. Hablaba (mal) de mí y creía conocerme...

Ni lo intentes.

-Algunos tipos tienen pies en lugar de orejas, dijo mientras meaba bilis y alimentaba peces entumecidos del ártico…

-Entenderías pero no contarás el cuento mañana, maldito esperpento, respondió ella. Tomó el hacha de Bronson, de Nicholson, del enano sin nombre y partió la espera en mil pedazos.

Hay situaciones que no pueden ser resueltas, simplemente. No se puede objetar una matrícula, un asiento de clases, una verdad absoluta. No se puede, es un hecho. Tanto es así, que cuando debió acordar los puntos del contrato recordó que no deseaba nada en la habitación, no podría seguir perdiendo el tiempo.

Así fue que tomó un paquete de cigarrillo y dejó el kiosco sin encargado…

Pronto será otra vida, pensaba en las mañanas que despertaría solo. Libertad de inanición, deseo de satisfacer complejas competencias de poluciones…

¿Comprensión? La capacidad es relativa. La posibilidad es situación desamparada, ni lo intentes. Luego del mediodía, retomó las actividades en el jardín. Bajo un sol insinuante entre nubes de gases tóxicos retiró malezas y habló con orquídeas y tulipanes. Entonces un caracol gris y aginebrado se encargó de la merienda.

Aromas a jengibres, cajitas de rapé y chaquetillas de color caqui. Un hombre de alta sociedad que abandona comodidades para darse la gran aventura de su vida. Siempre lo mismo. Gemelos para las mangas del saco, maldad desalineada persecutoria, injusta condena social, fuga, resolución, retorno y redención. Siempre, siempre lo mismo.

Final a mitad de camino, caso cerrado, no vale la pena seguir buscando. Espíritu testarudo, intuición atropellada, naturaleza y silogismos categóricos de todo tipo. No cierra. Investigación, búsqueda de la plena razón, heroísmo intelectual, revolver papeles, la cinta pasa, una otra y otra y otra vez…

“¡Detén el video!” Agrandar la imagen, mirar de cerca, claro. Está ahí, siempre estuvo ahí. Es muy ingenioso. Ingenioso y hermoso. Una obra de arte. Jaque mate. Ninguna película termina a los cuarenta minutos. No es engaño, es licencia.

Cuando el responsable de administración, con su fobia y su débil rodilla responde que todos están contra él, las batallas de las cadentes melodías de Birshcmann se elevan a la sublime eternidad de las inauditas historias sin moralejas de tiempos olvidados. Cuando tribus nómades que asustaban extranjeros con revueltas y transgresiones, sorprendían de repente con presentes fastuosos y rostros hostiles pero sumisos. Historia.

Un buzo envuelve mis pies fríos, no se por qué. Las cosas son como son. Convierte la nieve en copos del futuro inmaterial. Retazos de posibilidades y nadie va a tocarte. En fin, cuida de tus pensamientos menos permeables, cuida de tus ojos perdidos, cuida de tu olfato de investigador barato. Sujétate!

se vieron por casualidad

- y quien lo dice, el reserva moral de la nación - "la" reserva - matate, tinaja de roble! - débil hepático! pasaron 3 horas así

otoño

otoño