dejó una esquela:
"no me alcanzan las palabras, yo no alcanzo a las palabras. entre tribunas de intereses que descarnan el deseo de lo justo, lo necesario, lo sutil, lo inocuo pero real..."
se sabía poco de ella. dicen que buscaba un plano de armonía, una grieta donde guardar un cuerpo inclasificable, una arquitectura sin pasillos y mantener prudente distancia de la cartografía de los desplantes. el tiempo la había vuelto fan de la carrera de vivaldo, conocedora exquisita de la batalla de sepulveda y visitante habitual de terminales nerviosas...
martes, enero 12, 2010
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antes esto se iba a titular "morir de a poco o todo junto", ahora ya no sabe nada
No es retórica. Ni se si es pregunta, pensaba. se sentía sin ganas de vivir, tampoco de morir. la vida se le parecía cada vez más a una muer...
otoño
2 comentarios:
que sensibilidad, linch, para descubrirle las crisis a las terminales. ¿o es estudiado, usted, en psicologia material?
¿una combi de clona?
buen texto!
ethel artaud.
Ajá.
Saludos cordiales.
Corto y fuera.
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