"Cuando los hombres de ciudad conocieron el automóvil, los hombres del campo competían por mejorar las razas de los caballos. Cuando los hombres de ciudad comenzaron a conocer la velocidad y los mecanismos automatizados (un avance tan revolucionario como la tecnología digital) la gente de campo conoció el menosprecio.
La guerra no tardó en aparecer. Fábricas de automóviles contra criadores de ganado; el Ford T vs. Mr. Ed, el frente siderúrgico/petrolero vs. el oligopolio terrateniente de la ganadería y jockey club.
El ganador, como todos saben fue el mercado del automóvil, que terminó corrompiendo al vanidoso hombre de campo, enajenándolo con la pick up".*
*de "La cosa es así, nomás" ensayo de José Luis Ludueña. 1997. Editorial Pernococho.
1 comentario:
La Editorial Pernococho supo ser muy prestigiosa. Publicó los "Haiku en do menor de Bordenave." y "Memorias del Dr. Vergatiesa.", a fines del siglo pasado. Referentes.
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